El municipio de Ullum, San Juan, lanzó una campaña con el objetivo de “solucionar” la superpoblación de perros que están en las calles en esa localidad. El intendente propone sacrificar a los que pasados los seis meses en el refugio municipal no hayan sido adoptados y generó polémica.
En las últimas horas, el intendente del Frente de Todos Leopoldo Soler explicó el plan: “Vamos a hacer un refugio para perros callejeros, pero quiero que se entienda que todo lo que tengo en mente es para cuidar a los ciudadanos”.
Cabe recordar que, en los últimos meses, dicho municipio fue noticia por varias muertes ocasionadas por jaurías, situación que tiene en alerta al gobierno. “Es por eso que el destino final de los animales que no sean reclamados por sus dueños o que no sean adoptados, será la eutanasia”, indicó.
Según un diario local, la idea es que los perros permanezcan hasta seis meses. Si en ese plazo no son reclamados por sus dueños o adoptados, se les aplicará eutanasia. Asimismo, el intendente detalló que la idea es que el refugio funcione donde está el actual centro de Zoonosis.
Pese a que el plan es dar un plazo de 6 meses, según detalló el intendente, podría reducirse. “Haremos un reglamento para que los animales que sean secuestrados en la vía pública, tengan la posibilidad de ser adoptados o recuperados por sus dueños. Pero, si eso no pasara, en el transcurso de 3 o 6 meses, tiempo que será definido con el Consejo, el animal será sometido a una eutanasia”, remarcó.
Sobre el final, se adelantó a las críticas que generó la medida: “Sé que esto va a generar polémica, pero todo aquél que no esté de acuerdo puede venir y llevarse el animal para salvarle la vida”. Y sostuvo que apelan a que los proteccionistas que no estén de acuerdo con la eutanasia puedan adoptar los animales.
