El presidente Javier Milei hizo su debut este martes ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) con un encendido discurso que utilizó para criticar la agenda 2030 y para diferenciarse de la organización, que acusó de tomar “un rumbo trágico”.
Así se expresó el mandatario al exponer por primera vez en la 79° Cumbre de la ONU en Nueva York, ante la que se presento no como “político” sino como “economista liberal libertario”.
“La ONU pasó de ser una organización que buscaba la paz a una que quiere imponer como viven todos los ciudadanos del mundo, imponiendo una ideología única”, comenzó en su duro discurso el mandatario argentino.
También sostuvo que “la Agenda 2030, aunque bienintencionada en su metas, no es otra cosa que un programa de gobierno supranacional de corte socialista que pretende resolver los problemas de la modernidad con soluciones que atentan contra la soberanía del Estado nación”.
También señaló que esa agenda “violenta el derecho a la vida, la libertad y la propiedad de las personas”. El mandatario insistió además con que el “colectivismo y el postureo moral de la agenda woke se han chocado con la realidad y ya no tienen soluciones creíbles para los problemas del mundo, y de hecho nunca las tuvieron”.
En ese sentido, dejó en claro que “en esta casa, que dice defender los derechos humanos, han permitido el ingreso al consejo de DDHH a dictaduras sangrientas como Cuba y Venezuela”.
“También permitieron el ingreso al Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer a países que las castigan por mostrar la piel”, sostuvo.
En el cierre de su discurso, que duró casi 15 minutos, Milei dejó un mensaje a futuro: “A partir de este día, sepan que la República Argentina va abandonar su posición de neutralidad histórica que nos caracterizó y va a estar a la vanguardia de la lucha en defensa de la libertad”.