Este viernes por la madrugada tendrá lugar el eclipse lunar parcial más largo del siglo en la Argentina y el más largo en 580 años en el hemisferio norte, donde tendrá una una duración de casi tres horas y media. Aunque no sea una verdadera “luna de sangre”, volverá la Luna rojiza oxidada.
El fenómeno iniciará alrededor de las 4 de Argentina y alcanzará su máxima visibilidad a las 6 de la mañana y según los cálculos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio ( NASA). El eclipse durará alrededor de 3 horas y 28 minutos, lapso en el cual la sombra de la Tierra cubrirá en un 97,4% de la luna, por lo que no quedará completamente a oscuras.
Cómo ver el eclipse de Luna
Si bien se verá en casi todo el planeta, los mejores lugares para disfrutar del fenómeno serán del centro al norte del continente americano, en Argentina, en tanto, al igual que Brasil, la mayor parte de Australia, Nueva Zelanda, Japón y el sudeste asiático, solo podrán observarlo casi completo quienes se encuentren más al oeste-noroeste.
En Buenos Aires, solo será visible una parte del eclipse. La parte penumbral comenzará a las 3:02 y el eclipse parcial se verá a las 4:18. El máximo de la sombra se espera para las 6:02, pero esto no podrá verse desde este sector del país, ya que la Luna estará oculta por el horizonte.
Lo más avanzado que se podrá ver del eclipse en la Ciudad de Buenos Aires será alrededor de las 5:39
Un eclipse ultralargo
La NASA dice que este eclipse parcial es ultralargo porque la luna está casi en la parte más alejada de la Tierra en su órbita (conocida como apogeo), lo que significa que la luna se mueve un poco más lento a través de la sombra de la Tierra.
Además, el hecho de que el eclipse sea casi total significa que “la luna pasa más tiempo en la umbra de la Tierra que en un eclipse ‘más parcial'”, afirmó la NASA.
Cómo será el eclipse de Luna
Los eclipses lunares ocurren cuando la Luna pasa la sombra de la Tierra y está al menos parcialmente cubierta por la sombra de nuestro planeta.
En su punto máximo, la luna estará cubierta en un 97% por la sombra de la Tierra y estará bien adentro de la parte más profunda de la sombra (llamada umbra).
Estos dos factores deberían ser suficientes para permitir que la luz solar refractada de los bordes de nuestro planeta cubra a nuestro vecino lunar en un tono marrón rojizo. Pero debido a que no será un eclipse lunar total, no se considera una verdadera “luna de sangre”.

