Murió la mujer que había sido apercibida por las autoridades porteñas por salir a tomar sol en el barrio de Palermo durante la cuarentena.
Sara Oyuela, conocida como la “jubilada rebelde” rompió el aislamiento el 21 de abril de 2020 cuando se sentó con una reposera amarilla y blanca en el Parque Tres de Febrero y la Policía la notificó que estaba incumpliendo la cuarentena estricta y debía volver a su casa.
“Colaboren conmigo, que soy una vieja que necesita aire y sol. No estoy contagiando a nadie”, pidió la mujer de, por entonces, 83 años. Es día explicó que necesitaba estar al sol unos minutos “por la vitamina D” y aseguró que después se iría. “Déjeme hasta las 15.20, sea bondadoso, no estoy jorobando a nadie”, le pidió a los agentes.
Murió Sara Oyuela, la jubilada que rompió la cuarentena en plena pandemia para tomar sol en una plaza
El 21 de abril de 2020, la mujer se convirtió en la primera “rebelde” del confinamiento y cuestionó a las autoridades con una reposera amarilla y blanca.#DictaduraSanitaria pic.twitter.com/ZpYjclVDke
— 🇦🇷 Pablo Sebastián Giles (@pablosgilesok) January 10, 2023
Los policías le insistieron con que debía regresar a su casa inmediatamente e incluso le tocaron el timbre a su marido para que los ayudara, pero el hombre les dijo que “hace 32 años que estamos casados y nunca la pude convencer de nada”.
Finalmente, después de media hora y tal como le había advertido a los policías, la mujer se puso guantes y un barbijo, levantó sus pertenencias y se retiró del lugar. Los oficiales la siguieron, intentaron detenerla y forcejearon con ella para impedir que ingresara a su casa. Luego le labraron un acta, quedando imputada por violar la cuarentena.
“Es una gran estupidez por parte de la Policía, que en lugar de estar haciendo lo que tiene que hacer está vigilando el pasto donde no hay nadie”, sostuvo ese día, y advirtió: “Lo voy a seguir haciendo cuantas veces se me ocurra”.