El Presidente de Brasil tenía intenciones de presenciar el encuentro entre Santos y Gremio de Porto Alegre, en el que Santos venció por 1-0, pero el acceso al estadio le fue denegado por no estar inoculado contra el coronavirus.
Evidentemente contrariado “¿Para qué un pasaporte de vacunas? Quería ver al Santos ahora y me dijeron que tenía que estar vacunado. ¿Por qué debe ser así?” Preguntó a los periodistas el presidente brasileño que ha tenido una actitud cuestionada acerca del Covid-19 durante la Pandemia.
Los protocolos del país vecino indican que las presonas que asistan a los estadios deben estar vacunados y haberse sometido a una prueba diagnóstica en tiempo reciente. “Tengo más anticuerpos que los que se dieron la vacuna”, reafirmó el primer mandatario del país vecino, contrario a la normativa y sin portar el barbijo.
En presidente de Brasil no está inmunizado y viajó en septiembre a Nueva York participara en la asamblea general de Naciones Unidas pese a la pandemia. La ONU solicitó que todos los invitados estén vacunados, aunque no pidió un certificado. Jair Bolsonaro, que desprecia la eficacia de las vacunas y tuvo covid-19 sin efectos graves fue el primer orador de la asamblea.
