Momentos de terror y desesperación se vivieron en la escuela secundaria N°5176 de Villa Esmeralda, Salta, cuando un alumno de 14 años ingresó al establecimiento con un machete y atacó a su compañero frente a docentes y estudiantes.
El adolescente había sido apartado minutos antes por comportamiento violento, pero volvió armado tras ir hasta el auto de su madre. Luego de una intensa búsqueda por los pasillos de la escuela, logró irrumpir en un aula y atacar a su compañero, desatando el pánico entre los alumnos.
Según el testimonio de los estudiantes, todo comenzó durante el recreo, cuando el agresor molestaba a una compañera y la víctima intervino para que la dejara en paz. Esto derivó en una discusión verbal y en un primer ataque físico, donde el adolescente golpeó en la espalda a su compañero hasta que intervinieron los docentes.
Ante esta situación, la directora decidió convocar a la madre del agresor para hablar sobre su conducta. Sin embargo, tras la reunión, el joven salió del despacho, fue hasta el auto de su mamá y tomó un machete.
Luego, regresó a la escuela y comenzó a buscar a su compañero recorriendo los pasillos con el arma en la mano.
El ataque quedó grabado en videos tomados por los alumnos. En las imágenes, se observa cómo el agresor intenta ingresar al aula de 1° año, donde se refugiaba su compañero.
Los docentes intentaron contener la situación mientras una profesora llamaba a la Policía: “Quiere entrar a la escuela, por favor pedimos urgente que se acerque personal. Tenemos dos profesores en la puerta que no pueden hacer mucho”, suplicaba la docente.
El momento de mayor tensión se vivió cuando el adolescente logró forzar la puerta del aula y entró armado, mientras los alumnos gritaban y escapaban desesperados. Una profesora intentó frenar la agresión, pero el atacante ya tenía a su compañero del cuello y estaba a punto de golpearlo con el machete.
Según la madre de la víctima, su hijo se salvó gracias a la intervención de su primo, quien lo empujó contra un banco antes de que recibiera el ataque. Finalmente, un profesor logró desarmar al agresor, quien escapó antes de ser retenido por la policía.
Tras la grave situación, la directora del colegio presentó su renuncia, mientras el Ministerio de Educación de Salta formó un comité de intervención urgente para brindar asistencia psicológica a los alumnos, docentes y familias afectadas.
Por su parte, la madre de la víctima exigió medidas de seguridad urgentes y presencia policial en la institución: “Este chico lo va a matar donde sea. Mi hijo sigue con miedo y me pidió que lo cambie de escuela”.
El agresor fue retenido por la Policía y quedó a disposición de la fiscal penal juvenil Carolina Mateo Bellini, quien lleva adelante la investigación. Mientras tanto, la comunidad educativa sigue conmocionada y reclama mayor protección para evitar nuevas situaciones de violencia en las aulas.